Desechos verdes para una vida verde

Es una práctica común en muchos hogares la limpieza de patios y jardines. Lastimosamente la mayor parte de estos desechos, que suelen ser ramas y hojas, terminan siendo quemados y en el mejor de los casos, enviados a los vertederos. Estamos desperdiciando el potencial de estos desechos, ya que pueden servir de abono para la agricultura y la jardinería.

Las municipalidades de varias ciudades de Honduras también tienen como práctica el mantenimiento de sus áreas verdes en carreteras, parques y áreas de recreación. También estos desechos terminan en los vertederos de basura, mezclandose con sustancias tóxicas y produciendo metano durante su descomposición.


En Ciudad del Cabo, Sudáfrica, se ha implementado un interesante programa de manejo de desechos verdes, produciendo un abono orgánico llamado Compost. De esta forma, en lugar de podrirse y generar metano, estos desechos se aproechan para producir abono orgánico para la agricultura. Con ello se solucionan varios problemas: se reduce el tamaño de los vertederos, se evita la producción de metano (cuyo efecto invernadero es superior al del dióxido de carbono) y se sustituyen los fertilizantes químicos por abonos naturales amigables con el medio ambiente.